que va con uno
después
se regresa
sola.
Ella sola
es el destino
con su camino
de aurora.
Y uno sigue
subiendo bola
vida abajo,
pero ahora
ardiendo
y atlado
de caracola.
Uno
que es un trino
hijo del viento
tremola
vida arriba
también
con su herida
sola.
XII, 1984
Para OTTO RICARDO
Publicado en el libro MUSICA DE SINFINES 1988 de Eutiquio Leal
(Página 21)
No hay comentarios:
Publicar un comentario